TURQUIA

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Bella, fascinante, variada, así es la península de Anatolia, también llamada Asia Menor y hoy conocida como TURQUIA. Su privilegiada posición la convierte en puente entre Oriente y Occidente, y la ha hecho cuna de una docena de civilizaciones a lo largo de sus 5.000 años de historia. Es una tierra en que lo antiguo y lo moderno conviven, en que paisajes llenos de dramatismo se unen a grandes playas sin multitudes junto a mares no contaminados, es un país que alberga impresionantes ruinas de civilizaciones clásicas, que posee una excelente cocina y la genuina amabilidad de su pueblo.

Turquía es definitivamente uno de los destinos turísticos más importantes del mundo con sus ricos remanentes de la historia y maravillas naturales.

Un viaje organizado a Estambul incluye momento mágicos, como la visita a la Basílica de Santa Sofía, iglesia vizantina del siglo VI, que pasó a ser mezquita y que hoy aloja como museo la que posiblemente es la mejor colección de mosaicos bizantinos del mundo. El Gran Bazar, con sus más de 4.00 tiendas y la casi obligación de regatear con los mercaderes en busca de gangas, es otra de las experiencias que ofrece la ciudad. Al igual que admirar las centenarias mezquitas que pueblan la ciudad, entre ellas la Azul o la de Solimán, o realizar un crucero por el Bósforo observando sus puentes y los palacios y fortalezas que pueblan sus orillas. 

Un visita por Turquía debe incluir una visita a Ankara, la capital del país, y punto de partida para descubrir la Capadocia, la región del Anatolia conocida por sus escenarios de cuento de hadas. El Valle de Goremo o el Castillo Uchistar, ambos Patrimonio de la Humanidad por la UNESCO, son algunos de los puntos que no hay que perderse, ya que forman paisajes volcánicos únicos en el mundo. Tampoco hay que dejar de visitar al menos una de las ciudades subterráneas de Kaymakli, Seratli o Ozkonak, construidas por las comunidades cristianas.

El viaje por Turquía continúa hasta Konya, una pequeña ciudad célebre por ser el lugar de nacimiento del maestro Rumi, fundador del sufismo. El mausoleo construido en su honor es su principal atracción turística, en la que destaca la belleza de los azulejos verdes que decoran tanto las paredes interiores como su cúpula.

Opcional, aunque muy recomendable, es la excursión a Pamukkale, donde conseguirá la que será la foto más bucólica de todo el viaje. Durante la visita se podrá recrear admirando su "Castillo de Algodón", un impresionante conjunto natural de piscinas blancas que cubren la ladera de la colina. Será como estar en las nubes. Como constraste, la ciudad también cuenta con las ruinas de Hierápolis, con sus famosas necrópolis y donde se cree que estaba la puerta de Plutonio, que daba acceso al Infierno o Inframundo.

Para terminar, un viaje de turismo a Turquía debe incluir una parada en Éfeso, muy cerca de la ciudad de Esmirna, a orillas del Mar Egeo. Este conjunto arqueológico es uno de los más espectaculares del mundo y alberga,entre otros monumentos, las ruinas del Templo de Artemisa, una de las Siete Maravillas del Mundo Antiguo.

Cuando todo pase, porque todo pasará, volveremos a vernos y a viajar por lugares maravillosos. Te interesaría recibir información sobre este destino una vez los viajes se reanuden? Dejanos tu consulta o comentario en el cuadro de la derecha.